A pesar de tener tres siglos y medio de haber sido fundado, que solo está a diecinueve (19) kilómetros de Cúcuta y que además sea protagonista grande en buena parte de nuestra historia, eso tan solo le otorga una mirada de reojo por parte de la administración municipal cucuteña y un coro que se oye duro al decir “que son 350 años de olvido”
Y sin duda las cosas son así, pues a pesar de la importancia y peso de la fecha para esta antiquísima población, fueron muy pocas las cosas que se vieron con ese motivo el día 15 de febrero fecha de la celebración, salvo el pequeño pendón pegado en la pared recordando la fecha.
Tuve la fortuna de acompañar a la comunidad ese día por invitación del sacerdote del lugar GUSTAVO SANCHEZ ARDILA, entre otras cosas porque la parroquia también estaba de cumpleaños, 60 en total y el mismo día del corregimiento.
Por supuesto se realizó procesión con el Santo mártir y eucaristía concelebrada en la pequeña pero acogedora iglesia del lugar, llena de feligreses, así fuera día laboral.
Luego se llevó a cabo un breve acto protocolario en la instalaciones del colegio Fray Manuel Álvarez, con himnos, discursos y aplausos, bueno lo normal, pues nada o ningún anuncio en particular de obsequio o algo así, se escuchó por parte de quienes conformaban la mesa principal.
La comunidad esperó la presencia del Gobernador y también del Alcalde, pero en su reemplazo fueron enviados funcionarios de tercer nivel, así como por cumplir.
Por eso el reclamo airado del líder comunal Angelmiro Barragán Pérez, uno de los más conocedores de los problemas que afectan a su comunidad al señalar con firmeza de todo lo que les afecta, pero también de los oídos sordos a sus peticiones de la actual y anteriores administraciones.
De nada vale su liderazgo, mimado hasta el extremo, pero durante la temporada electoral, la misma que una vez pasa, también archiva nombres como el de este gran trabajador y colaborador.
SAN FAUSTINO EN LA HISTORIA
El pequeño poblado fue fundado por el capitán Antonio de los Ríos el 15 de febrero de 1662, en esa pequeña planicie cerca al río Pamplonita, calurosa si, pero refrescada también con la suave brisa que viene de los cerros donde hoy está el clima frío de Cúcuta, Ricaurte.
Obviamente el lugar se constituyó durante mucho tiempo en punto estratégico, primero para las labores de la conquista española, luego para el comercio y también durante la independencia.
Son muchos los historiadores que han investigado y escrito sobre el tema, pero en particular me gusta todo lo compilado por Jorge Meléndez Sánchez, que lo ha publicado en maravillosos libros, de contenido delicioso para leer y entender el pasado de estas tierras, como lo es “Cacao y río, historia del valle de Cúcuta, San Faustino de los Ríos…”
Calles solitarias en San Faustino - N.S. |
Allí, aunque los historiadores no se han puesto de acuerdo, dicen que nació Francisco de Paula Santander y otra buena cantidad de hombres y mujeres que a través de tantos siglos han aportado ideas, desarrollo y progreso.
Pero con todo eso y más, el sitio se ha quedado rezagado y hasta la historia también se ha ido refundiendo en los avatares del destino, los mismos por los que clama y pide San Faustino.
No es que esté agonizando, pero si está en cuidados intermedios y eso es mucho decir.
SAN FAUSTINO HOY
Este corregimiento cucuteño además de su abundante historia y por supuesto la amabilidad y solidaridad de sus habitantes, está rodeado de riqueza, algunos de los mejores yacimientos carboníferos, del coquizable tipo exportación, están en sus cerros.
Sobra decir que buena parte del empleo en la zona lo proveen las compañías de orden privado dedicadas al tema, sea para la extracción, procesamiento o transporte del combustible fósil.
Y según me cuentan las exploraciones de gas y petróleo también están a la orden del día por esos contornos, de ahí que a muchos “propietarios” de predios baldíos ahora se les demore un poco más su titulación.
Las tierras de su valle hoy están en pleno auge y acondicionamiento para labores agrícolas y ganaderas a gran escala, así se puede constatar desde la carretera, se ve que muchos sitios están recibiendo inversión privada en tal sentido.
Y el resto de fincas, pequeñas en su mayoría, esas si que necesitan la mano del estado, así sea para sacar adelante planes de seguridad alimentaria.
Sin embargo todo ese panorama se adoba con el pésimo estado de la carretera, la 55, o sea La Panamericana, vía nacional, que llega hasta los confines de la frontera por allá en Guaramito, donde un soñado puente de integración hoy duerme en los anaqueles de alcaldías, gobernación, ministerios y otras instituciones.
Nada más salir por El Salado, por San Gerardo, uno comienza a sentir las incomodidades de la desvencijada vía, huecos, derrumbes, pedazos de banca en el río, falta de carpeta asfáltica en casi todo el recorrido.
Hay muchas cuadrillas de obreros, maquinaria pesada, pero es insuficiente, los pasos álgidos son muchos, hay infinidad de cerros que amenazan desmoronarse y a la mente regresan las grises imágenes del invierno, infame pero cierto.
Enormes derrumbes junto a la vía |
Enormes volquetas transportando carbón |
Además el intenso tráfico de grandes volquetas y tractomulas cargadas de carbón, aportan lo suyo al ya deteriorado pavimento de la ruta y lentitud de la movilidad.
Si la vía estuviera en óptimas condiciones y con puente en La China, conectaría con La Fría en Venezuela en poco más de una hora y se abriría un gran polo de desarrollo, pero tan solo es una utopía.
Hay deseos, aún se conserva el optimismo, crece la esperanza y la comunidad espera, ya tocará para el cumpleaños 351, ojalá para esa fecha por lo menos haya un anuncio de importancia, sabiendo que los problemas son de toda índole, como salud, educación, recreación o conectividad.
Y aunque el municipio tiene infinidad de dificultades, todos los residentes de San Faustino esperan que Donamaris de una miradita hacia el lugar, bien saben que tiene otros chicharones enormes como lo del predial, el hueco Bavaria o el espacio público, pero una manito adicional hacia el sector rural cucuteño sería lo ideal.
Desde mi óptica esta es una tierra que promete, no solo por los grandes recursos minerales que ya se explotan, también por el tema turístico, hay excelentes paisajes, clima apropiado, incluyendo el frío de Ricaurte, hermosas fuentes cristalinas, así sea para hacer “paseos de olla” y muchos más, que con la bendición de Dios y los gobernantes pueden generar bienestar, tranquilidad, calidad de vida y porque no, unos pesos de más.
Pero mientras eso sucede, SAN FAUSTINO DE LOS RIOS, seguirá durmiendo una ya muy larga resaca en medio del pavoroso olvido.
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son lugares muy hermosos. hay que seguir en la tarea de buscar un reconocimiento histórico y social.
ResponderEliminarMe gusta conocer pueblos voy a ir a conocer san faustino
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